Hasta los paladares más exquisitos alabarán este dulce de hojaldre, nata y frambuesas. Un postre equilibrado y repleto de matices, tanto en el sabor como en la textura.
¡Una receta de gala!
Lo mejor de este dulce es que la acidez de la frambuesa contrasta con la suavidad de la nata y el crujiente del hojaldre.
En la elaboración de un postre de nata y frambuesas con hojaldre y gelatina para 4 ó 6 personas, necesitas:
Para la crema:
Para la base de hojaldre:
El primer paso es batir 300ml de nata hasta que esté montada y reservarla en el frigorífico.
A continuación, hidrata en agua fría las láminas de gelatina.
Por otro lado, pon en un cazo al fuego el resto de la nata líquida, 200 ml, con el azúcar glacé y remueve hasta que se disuelva. Cuece la preparación durante 4 minutos y retírala del fuego.
Escurre la gelatina del agua fría, incorpórala a la mezcla anterior y resérvala.
Cuando la nata esté atemperada, incorpora el zumo de limón y mezcla bien.
Por último, bate la nata montada con la nata de zumo de limón y resérvala en el frigorífico.
Precalienta el horno a 220°.
Estira el hojaldre con ayuda de un rodillo, píntalo con la mantequilla fundida y espolvorea generosamente con el azúcar glacé.
Corta el hojaldre en 4 ó 6 círculos, y hornéalo a 220° durante unos 10 minutos o hasta que presenten un aspecto dorado y crujiente.
Cuando los saques del horno, deja que enfríen sobre la rejilla metálica.
Monta el postre de nata y frambuesas
Coloca 2 frambuesas en el fondo de cada hojaldre y espolvorea con el azúcar glacé. Reparte la crema y decorar con más frambuesas.
¡No dudes en servirlo con una gelatina casera de fresa o de limón!