Tan clásicos en estas fechas son los mazapanes, como los polvorones. Cada vez que comemos un polvorón nos recuerda a nuestra infancia, cómo los apretábamos y moldeábamos para poder comerlos sin desperdiciar ni una sola miga.
Veréis que no son complicados de preparar en casa y el resultado es increíble.
En tan solo 30 minutos tendrás unos polvorones tan ricos como los que compras en las tiendas.
Para elaborar unas 20 unidades necesitas:
Vamos a empezar preparando la masa: En un cuenco mezcla la harina con la manteca de cerdo, 75 g de azúcar glace, la almendra, la canela y el ajonjolí. Amasa con las manos, o con la ayuda de un robot de cocina, hasta obtener una mezcla lisa y homogénea.
Extiende la masa formando un rectángulo sobre una superficie enharinada, para evitar que se pegue, con un grosor de 2 cm en toda la masa.
Recorta la masa con la ayuda de un cortapastas redondo u ovalado o simplemente en cuadrados con un cuchillo y dispón los polvorones sobre una placa de horno forrada con papel de horno. Termínalos con un poco de ajonjolí espolvoreado por encima antes de introducirlos en el horno.
Mete los polvorones en el horno, precalentado a 220ºC, con el grill encendido, durante 8-10 minutos.
Pasado este tiempo, si ya ves que están dorados (más por los lados que por el centro), retíralos y déjalos enfriar.
Una vez fríos, envuélvelos con papeles de colores o celofán. Guardarlos en cajas metálicas para evitar la humedad.
¿Cuál es tu dulce navideño favorito?
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Sounds like I MUST put a walking tour of your nierhboughood on my Summer Bucket List. It all sounds so delish!Last Friday I had steamed pork buns in Oakland’s Chinatown. I think I NEED to compare. 😉